Per
expressar la seva opinió, en un mitjà català, sobre les
institucions andorranes, que molts compartim però no gosem a dir-la,
el volen callar privant-lo del seu lloc de treball en el qual vàrem
posar ells mateixos. Els barons dictadors ja ho han decidit. El
director de RTVASA , Sr. Robert, al carrer i a callar.
*Ara
segons les darreres declaracions de varis ministres, semblaria que de
moment no l´acomiaden i fins i tot l´hi posen una medalla per la
seva tasca al cap davant de l´empresa. DA ja semble més el PP
espanyol que un partit democràtic andorrà.
Molts
de nosaltres també pensem, en veu baixa, que l´institució de
coprincipat és obsoleta i que avui tant el bisbe de la Seu com el
president del país veí del nord, sobren.
Poden
els dos Coprínceps ficar-se en la política interior i fer xantatge
a Govern?. No. Ja n´hi ha prou ja ho fan els barons i els bancs.
Un Conseller del PS, Sr
Rios, ha gosat denunciar públicament que existeixen Consellers que
en ser propietaris de empreses només treballen (presumptament) per
el seu propi benefici o es beneficien (presumptament) del seu càrrec.
Són ben coneguts, degut a les petites dimensions del Principat, els
afers de funcionaris de Govern, de Comuns i de Policia que tenien i
tenen negocis quant la llei ho prohibeix explícitament. Bars,
constructores, auto-escoles, pubs o discoteques. Coma mínim no és
ètic. Però existeix la ètica i la vergonya al país?.
La política de girar el
cap i fer el sord típica de casa nostra requereix un canvi de
mentalitat. També cal perdre la por de parlar. Així mateix en no
existir una fiscalia anticorrupció no es demanen responsabilitats i
per tant ningú té por. I tots al seu aire, que aquí no passa rés.
El
2013 ha estat marcat per vars temes. Per exemple la guerra entre
Govern i els funcionaris per la retallada de les pensions, que lluny
de´arreglar-se amb consens i diàleg, ara estem a punt de portar
l´afer a Batllia,
La
justícia, un altre gran tema pendent. Varies cadires ocupades per
gent incompetent i prepotent i amb (morts a l´armari) no s´aguanta
per enlloc. Un sol advocat ha tingut el coratge d´enfrontar´si i
dir que la policia menteix, Un búlgars no residents són a la presó
per la suposada mala instrucció i manipulació de probes envers
aquestes persones. Hi ha diversos casos a Batllia dels quals no s´en
sap rés des de fa anys. Un d´ells des de fa 12 anys. Està clar que
la justícia no és igual per tothom.
La
proposta de reforma de la CASS,
iL´errada informàtica dels
responsables del servidor dels fitxers dels afiliats que es podia
consultar via web per culpa d´un forat de seguretat. La directora
segueix en el seu lloc i cobrant un bon sou.
La
retallada social,
Els
acomiadaments al centre hospital-lari,
El
quasi miler d´aturats i dels qual el 90% no perceben cap ajuda,
Les
persones que són ateses per Càritas,
Trucades
telefòniques a fí d´ impedir la publicaciuó de un fet luctuós
dins de una família molt coneguda i ben “situada” a la Vall,
etc., etc.
Els
drets adquirits no es poden tocar. Al igual que al sistema privat un
contracte és un contracte es deu de respectar. Les retallades de la
Cass que DA impulsa són una aberració i una estafa. Sobre tot quant
el control d´aquesta és molt baix, al contrari dels sous.
Una
recent publicació de un diari espanyol en que un periodista
s´expressava molt clar, demostra que hi ha gent que té rancor a
Andorra.
Còpia
d l´article :
“Andorra,
¿modelo para armar?
Por: Miguel
Mora | 06 de enero de 2014
SOBRE EL AUTOR
Miguel
Mora es corresponsal
en París, antes en Roma y Lisboa, fue redactor en la sección de
Cultura y la Edición Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde
1992, y es autor del libro ‘La voz de los flamencos’ (Siruela,
2008).
La
corresponsalía en Francia tiene dos territorios anexos, como pasa
con el Vaticano y San Marino en Italia: Andorra y Montecarlo. Estos
cuatro minipaíses tienen una característica común: son paraísos
fiscales, o al menos lo han sido durante largo tiempo. Pero Andorra y
el Vaticano tienen mucho más en común de lo que parece. Por
ejemplo, los dos son Estados confesionales, y sin fisco: sus
ciudadanos son beatos y caritativos, pero no pagan impuestos, y el
Estado a cambio promete ocuparse de ellos si la cosa va mal.
Si
el papa es el rey del Vaticano y el co-rey de Vaticalia (con el
presidente de la República italiana), el Obispo de la Seu de Urgell
es el copríncipe de Andorra, a medias con el muy laico presidente de
la República francesa, lo que complica un poco la melé. Pero el
sello del Bisbe, que así le llaman los 77.000 andorranos censados
(de ellos, casi la mitad son extranjeros o residentes bancarios), se
nota mucho más fuertemente que el de Le Prèsident: en Andorra está
prohibida la prostitución -tolerada en la Seu- y los casinos de
azar, y aunque el Bisbe ha transigido ahora con la apertura de dos
sex-shops, la casi única calle de Andorra la Vieja es una sucesión
de bancos (Mora Bank, And Bank...) y de centros comerciales y tiendas
de electrónica, tabaco y perfumes (Julia, sobre todo, un imperio con
21 establecimientos edificado por la señora Bonet).
Andorra
es, en resumen, una pesadilla evasora y consumista tan obscena como
la profusión de tiendas de recuerdos papales y sucursales del IOR
que dominan la Via della Conciliazione, la arteria principal del
paisito vaticaliano.
Paseando
el otro día por esa limpísima, fascistoide e interminable calle
peatonal andorrana que pertenece a una sola familia -al parecer en
Andorra todo pertenece a cinco o seis familias de banqueros,
contrabandistas de tabaco y / o vendedores de cachivaches y
perfumes-, se me ocurrió la peregrina ocurrencia de pensar si no
estarán España y Cataluña precipitándose, ahora que una parece
que quiere ser un Estat soberano y la otra no quiere que lo sea,
hacia este bonito modelo andorrano de sociedad con clases.
La
verdad es que todo serían ventajas: en Andorra campan a sus anchas
los turistas rusos y hay agencias especializadas en organizar
excursiones para bajar a ver los partidos al Camp Nou; está
rigurosamente prohibido pedir limosna y dormir en la calle para que
no vengan los gitanos rumanos; los inmigrantes son explotados a
conciencia y muchos son pagados en negro, aunque abonan un 5,5% de
seguridad social pese a que no existe el Estado de Bienestar ni la
protección de desempleo y hay copago sanitario; tenemos un partido
de Gobierno único sin oposición que es centrista, demócrata,
católico y de derechas sin complejos de toda la vida, como CiU y el
PP; los empresarios pueden ingresar el dinero que ganan en bancos y
cajas fiscalmente opacos y dominan el Estado sin la menor hipocresía
gracias a la Constitución clerical redactada en los años noventa
por las cinco o seis familias de banqueros, perfumeros y
contrabandistas al mando de todas las operaciones.
Y,
por si fuera poco, el país no tiene moneda propia pero acepta euros
y rublos sin pestañear; no pertenece a la Unión Europea ni falta
que le hace, y un Obispo con barretina aficionado a expoliar el arte
sacro de Aragón copreside la jefatura del Estat, gracias a una
Constitución que garantiza a la Iglesia Católica Romana "el
ejercicio libre y público de sus actividades y el mantenimiento de
las relaciones de colaboración especial con el Estado, de acuerdo
con la tradición andorrana".
La cosa parece difícil de imitar, pero en peores garitas hemos hecho guardia, y la tentación pequeñista, ultranacionalista y catolicaza se sabe dónde empieza pero no dónde acaba.
En todo caso, como reto intelectual sería estimulante: ¿Aceptaría la Iglesia catalana la secesión si le dieran un buen cargo estatal al Bisbe de BCN? ¿Favorecerían las cinco o seis familias que cuentan en España y en Catalunya la implantación de este quasi perfecto modelo posfascista? ¿Cómo verían ERC y la intelligentsia progre culé y merengue darse constitucionalmente al capitalismo salvaje? ¿Aceptaría Francia tener otros vecinos así? ¿Acabarían los muy honrados y solidarios banqueros catalanes e hispanos dedicados a fomentar la evasión a gran escala y la abolición de la mendicidad y de las putas?
María Solá, una joven andorrana muy lista y muy crítica con su pequeño país -"somos muy superficiales y frívolos, nos gustan mucho los coches caros y la ropa de marca, y hacemos como que la crisis no ha llegado aquí"-, trabaja en la catedral de cristal -mezcla de parque temático, spa de lujo y decorado de Star Trek- edificada por un ampuloso arquitecto francés donde se encuentra el popular balneario Caldea y el muy selectivo centro de masajes Inuú.
La cosa parece difícil de imitar, pero en peores garitas hemos hecho guardia, y la tentación pequeñista, ultranacionalista y catolicaza se sabe dónde empieza pero no dónde acaba.
En todo caso, como reto intelectual sería estimulante: ¿Aceptaría la Iglesia catalana la secesión si le dieran un buen cargo estatal al Bisbe de BCN? ¿Favorecerían las cinco o seis familias que cuentan en España y en Catalunya la implantación de este quasi perfecto modelo posfascista? ¿Cómo verían ERC y la intelligentsia progre culé y merengue darse constitucionalmente al capitalismo salvaje? ¿Aceptaría Francia tener otros vecinos así? ¿Acabarían los muy honrados y solidarios banqueros catalanes e hispanos dedicados a fomentar la evasión a gran escala y la abolición de la mendicidad y de las putas?
María Solá, una joven andorrana muy lista y muy crítica con su pequeño país -"somos muy superficiales y frívolos, nos gustan mucho los coches caros y la ropa de marca, y hacemos como que la crisis no ha llegado aquí"-, trabaja en la catedral de cristal -mezcla de parque temático, spa de lujo y decorado de Star Trek- edificada por un ampuloso arquitecto francés donde se encuentra el popular balneario Caldea y el muy selectivo centro de masajes Inuú.
Esta
idea visionaria de las cinco o seis familias andorranas, que se
erigió en los años noventa, sigue siendo hoy uno de los grandes
reclamos de Andorra: agua termal entre montañas nevadas, jacuzzis al
aire libre, oxígeno a raudales, y fuera de eso hay alcohol y colonia
baratos, compras compulsivas, estaciones y pistas de esquí,
neoliberalismo clerical de Estado, y muchos turistas rusos de perfil
medio, que al parecer no disponen de suficiente polvo blanco y de
bancos negros en su país.
A
falta de Eurovegas, he ahí un proyecto de futuro para la España
eterna que se desangra y la Catalunya incomprendida. Marca Andorra.”
==
No deixaré de mencionar
l´enroca ment del ministre de turisme Sr. Camp que vol fer tornar Le
Cirque du Soleil al país. No s´entén que si s´estableixen a
Catalunya per temps indefinit els vulgui contractar una altre vegada.
És evident que no vindran cap veí del sud per veure l´espectacle.
I ara rabiant ja que l´hi han tombat el projecte de les fonts
lluminoses del milió d´€ vol fer publicitat per tal de que
vinguin turistes Gays. Al segle XXI encara existeix gent que fa
diferències. Vergonyós.
Amb la companyia dels que
estimeu, que tingueu un millor 2014. Amb salut i treball.